CHAMPOTÓN Y LA MALDICIÓN DE MOCH COHUO

#Columna

CHAMPOTÓN Y LA MALDICIÓN DE MOCH COHUO

Por: Arturo RODRIGUEZ HERNANDEZ

Desde siempre se ha dicho que en el municipio de Champotón, sus habitantes han sufrido la llamada maldición de Moch Cohuo, que atrae consigo una serie de desgracias, sobre todo cuando los funcionarios locales se han dedicado a disfrutar la vida con disipación o lo que es lo mismo, el valemadrismo en toda su expresión, provocando el incremento de los problemas sociales, los cuales desgraciadamente con el paso del tiempo se han incrementado de tal forma que hoy en día están convertidos en una verdadera carga para las autoridades municipales que ya no sienten lo duro sino lo tupido, pues no es fácil enfrentar una secuela de rezagos de toda índole, de los cuales el pueblo reclama solución inmediata, exigiendo una pronta repuesta a sus carencias de los servicios y obra pública, sin entender razones y acusando de todo y a todos los funcionarios públicos municipales por lo que sin distinción alguna los señala como corruptos y bandidos, sea quien sea y sin importar el color ideológico.

Los champotoneros son considerados como uno o los primeros en aprender o en aplicar el voto diferenciado o la alternancia en el poder, ya que en este municipio la ciudadanía ha tenido el valor de entregar su voto a conciencia, escogiendo a la persona y no a los partidos participantes en la contienda electoral, lo cual significa que la ciudadanía ya aprendió a razonar su derecho de escoger a sus gobernantes, aunque en varias ocasiones se equivoquen pues salen malos funcionarios, ya que en campaña ofrecen hasta las perlas de la Virgen y al llegar al cargo cambian de actitud y se convierten en auténticos tiranos que al final han dejado en el más completo abandono a los habitantes de todo el municipio, cuyas secuelas afectan directamente a la misma población que los llevo a los cargos públicos que utilizan para enriquecerse en forma descarada.

Por ahí reza un adagio que "del dicho hay mucho trecho" o aquel que "del plato a la boca se cae la sopa", ambos caen como anilla al dedo a la situación que se vive en todo el municipio de Champotón, en donde no se puede negar que existe un notorio y marcado rezago en diversas áreas del Ayuntamiento, motivo por el cual la gente reclama que le han fallado en las promesas de campaña, ya que ofrecieron y se comprometieron a cambiar mejorar las condiciones de vida de las familias champotoneras, quedando claro que las intenciones fueron buena pero la triste realidad es que al llegar a la silla presidencial, todo absolutamente todo es completamente diferente, ya que en primer lugar las arcas municipales están vacías por completo y para colmo el nuevo Alcalde recién ungido, sufre los golpes bajos que se dan en forma mensual llamados RECORTES PRESUPUESTALES, cuyas cantidades varían de acuerdo al Producto Interno Bruto, en el cual se incluyen las ventas petroleras y que en este aspecto hacen demasiado daño al estado, ya que cuando bajan de inmediato se aplica la reducción económica al estado y por ende a los municipios, y en contra de lo que debería ser al aumentar, simple y sencillamente no hay compensación alguna.

Champotón al igual que los nueve municipios restantes, sufren severos problemas con los recortes presupuestales, ya que el décimo o sea el de Campeche por ser el que alberga la capital del estado recibe trato preferencial, según los comentarios de los mismos funcionarios y uno que otro presidente municipal, el caso es que la situación que se está viviendo en los tiempos actuales en torno a cada jurisdicción municipal son críticos y muy peligrosos para el proceso electoral que se avecina, pues la inconformidad de los ciudadanos en general, sin importar edades, sexo, ideología política o religiosa, ni estrato social se hace patente y en muchos casos no entienden razones, aunque afortunadamente en la mayoría de los casos, aceptan las explicaciones que les dan los funcionarios de los Ayuntamientos, incluyendo al de Champotón.

Efectivamente la gente se desespera al ver que el tiempo pasa inexorable y sus demandas no tienen las repuestas adecuadas, al ver que las lluvias están cayendo con todas su fuerzas y que las calles están destrozadas, llenas de baches y hoyancos, que el alumbrado público tiene infinidad de desperfectos, dejando muchas zonas a oscuras y convertidas en madrigueras de malvivientes y drogadictos quienes impulsados por el vicio agrede a cuanto cristiano se pone enfrente o tiene la necesidad de transitar por los lugares desolados y sin la iluminación necesaria. En este punto se puede decir que son los mismos pandilleros quienes a pedradas rompen las lámparas sin que los vecinos denuncien ante las autoridades policiacas ya que también se encuentran involucrados sus familiares.

Una de las preguntas sin repuestas viene a ser, ¿Cómo es que se permite el excesivo narcomenudeo que existe en Champotón?, ¿Qué hacen los funcionarios de la Procuraduría General de la Republica para castigar a los envenenadores públicos?, cuestionamientos que se quedan en el aire, y como dijo el Monje Loco, nadie sabe, nadie supo, mientras que la niñez y la juventud cada día que pasa se pierde en el mundo de las drogas, situación que aunque parezca nota amarillista es una triste realidad que se vive principalmente en las colonias populares de Champotón y en forma esporádica hasta en pleno centro de la ciudad, de tal forma que el reclamo popular cunde por toda la ciudad y de las juntas municipales y zonas rurales, ya que la drogadicción es notoria por todo el municipio, incluso se sabe a ciencia cierta los sitios en donde se vende descaradamente y hasta el momento los de la PGR no hacen nada al respecto, prefieren combatir la piratería agarrando a los venteros de discos y levantar cascajos de los casinitos.

Puede considerarse que la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana cumple en medida de las posibilidades sus funciones de vigilancia, lo raro y extraño es que cuando se detiene a un individuo transportando o vendiendo drogas, de inmediato es puesto a disposición de las autoridades federales, para que en poco tiempo esté de nuevo en las calles haciendo de las suyas, y de ahí surge un nuevo cuestionamiento, ¿Por qué no se usa esa detención para sacar información e iniciar una línea de investigación?, y así poder desenredar la madeja y saber de donde provienen los enervantes y como llegan hasta al puerto de Champotón de donde se cree se distribuye hacia otros puntos del municipio, ¿será cierto lo que piensan las familias Champotoneras?, de que se trata de un negocio tan lucrativo que se encuentra protegido sin importar el terrible daño que ocasionan a la niñez y juventud Champotonera.

La jurisdicción champotonera también sufre los estragos que produce el alto índice de alcoholismo que se detecta claramente por todos lados sin importar condiciones sociales ni edades y mucho menos sexo de los individuos, la ingesta de bebidas embriagantes ocasiona serios problemas de desintegración familiar, por lo que el DIF Municipal aplica a fondo los programas destinados a proteger a la familia en general y de manera especial a los menores de edad, las mujeres sobre todo embarazadas y adultos mayores, en tanto que el Ayuntamiento mantiene de manera permanente el operativo de cero tolerancia a la venta de productos embriagantes y la vigilancia necesaria para erradicar el clandestinaje en este tipo de comercio.

Es del pleno conocimiento popular la situación económica que se vive en la tierra de Moch Cohuo, cuyo principal soporte después de la debacle de la producción de arroz, es la nomina del Ayuntamiento que cada tres años se ve incrementada pues los alcaldes salientes han dejado sus cuotas de nuevo personal, por lo que nadie ignora que cada quincena al mayor parte del presupuesto se destina al pago del personal activos y jubilados, la otra parte se destina a obras públicas que sin duda alguna se ven afectadas directamente por la carencia de dinero para la atención siquiera de los problemas prioritarios como son calles y banquetas, alumbrado público y agua potable, lo que sin duda alguna provoca las airadas demandas del pueblo.

Pero además y a pesar de los recortes presupuestales que se ejecutan de manera mensual en contra de las arcas municipales, el Ayuntamiento de Champotón continua entregando sus participaciones integras a las cuatro Juntas Municipales de Seybaplaya, Hool, Sihochac y Carrillo Puerto, una sangría financiera que también repercute en las finanzas de la comuna, por lo, que en muchas ocasiones han tenido que recurrir a préstamos o adelantos de las participaciones mensuales para poder pagar la nómina laboral, llegando al grado de aguantar el pago de los empleados de confianza por falta de liquidez. De ahí las pésimas condiciones financieras del Ayuntamiento que se ve imposibilitado en poder cumplir con los compromisos contraídos en campaña.

Y es el mismo presidente municipal, José Luis Arjona Rosado quien asegura que se trabaja de acuerdo a las posibilidades, no podemos hacer frente a todos los compromisos, el presupuesto no alcanza, cada mes nos quedamos amarrados de manos, sabemos la inconformidad del pueblo, pero la verdad es que no creen cuando se les dice que no hay dinero en tesorería, no es juego, no hay dinero, se tienen que hacer milagros para evitar la paralización de ciertas áreas del Ayuntamiento como son obras y servicios públicos, agua potable y reparación del alumbrado público, mientras que la reparación de calles se atienden como se va pudiendo, sabemos que nos critican pero hacemos lo que podemos, lo único que se puede adelantar es que se firmó el convenio para el próximo año, cuando van a incrementarse el presupuesto, mientras tanto hay que seguir apechugando y tomar la situación conforme de presente.

Otro sostén de las economía champotonera viene a ser la molienda del Ingenio La Joya, factoría que sin duda alguna deja una fuerte derrama económica en los meses de zafra, aunque por desgracia en la última temporada, su capacidad de molienda se vio rebasada por la sobre producción de caña de azúcar y de la cual miles de toneladas de vara se quedó tirada en campo y por otro lado como el gobierno federal no ha logrado o querido poner un freno a la introducción de fructuosa al país, el producto nacional tiene muy baja comercialización, pues las grandes empresas refresqueras prefieren traer el sintético del extranjero sin importar el daño que se pueda ocasionar en materia de salud entre millones de mexicanos.

La pesca de ribera desde hace años ha venido en decadencia primero por la contaminación ocasionada por los derrames petroleros cuyos efectos han alejado por completo los cardúmenes de las especies de escama, pero en honor a la verdad, el peor daño se lo provoca el mismo hombre con la brutal depredación que ejerce diariamente en todas las especies de agua salada, no distinguen nada, arrasan con todo lo que encuentran a su paso sin importar las épocas de veda, ya que de alguna los buzos tienen que llevar de comer a sus familias o vender el productos a los bodegueros sin escrúpulos para sufragar sus vicios, y todo ello por la falta de una vigilancia adecuada sobre todo en fines de semana, aunque también se menciona de cierta complicidad con funcionarios de la Conapesca.

Con todo lo anterior se deduce que la situación económica del municipio de Champotón se encuentra hoy en día bastante deteriorada, pues como en todo el resto del estado los incrementos mensuales a los precios de los combustibles pega directamente a la economía familiar, lo que obliga a los menores de edad a trabajar en lo que caiga, y en muchos casos hasta tener que abandonar sus estudios, y para colmo de de males con el paso del tiempo se acrecienta el temor de convertirse en un pueblo fantasma, pues la SCT mantiene el dedo sobre el renglón de construir el desvió carretero que vendría a hundir por completo a los Champotoneros que se sostienen con sus negocios que atienden a los viajeros, quienes con la nueva vía de comunicación pasarían de largo hacia la capital del estado o a Yucatán.

Los habitantes del municipio de Champotón se encuentran bajo la amenaza del hundimiento económico, sin embargo siguen de pie, luchando a diario para salir adelante, y para ello con el apoyo del gobernador del estado Fernando Ortega Bernés y con el presidente municipal quien a pesar de sus carencias trata de cumplir con sus compromisos. Todavía falta un año para tratar de cambiar el panorama champotonero y por ende las condiciones de vida de cientos de familias que ansían mejorar sus condiciones de vida con trabajo honrado y decente.